lunes, 27 de mayo de 2013

Cuando Luis miguel cantó en el club La Emilia

Por Celia Mesías

Todos los veranos, desde que Lupe dejó de llorar cuando no tenía cerca a su mamá, su tía Mabel y su tío Abel la llevaban a su casa ubicada en la Emilia a pasar unos días con ellos. Los amados tíos no tenían hijos, nunca pudieron tenerlos. Por esta razón, mitigaban sus ansias de ser padres con sus sobrinos. Eran fantásticos, en su casa Lupe se sentía genial, única hija; su tía Mabel había guardado en un cofre collares, aros y pulseras que solo ella usaba cuando iba de visita. Inclusive lo escondía en el garaje, en un huequito, para asegurarse de que nadie tocara “sus tesoros” en su ausencia. También, disponía de un bolso lleno de frutas de plástico con los que jugaba al supermercado y una valija llena de vestidos y zapatos taco alto que la tía ya no usaba.
En aquel mundo que armaba en el porche o en el living, no podía ser más que feliz la niña, jugando con sus amigos del barrio o los imaginarios. Ella era la bella princesa de algún cuento de hadas.
A la mañana, iban con la tía a hacer las compras al único mercado que había en el lugar. Le compraba todo lo que le gustaba: postre, galletitas dulces y hasta algunas golosinas, además de todo lo necesario para prepararle las más deliciosas comidas, ya que la pequeña era la que designaba el menú del día. Cuando no dormían la siesta, después de almorzar se dirigían al club, donde además de tener muchos juegos, tenía una pileta enorme donde tío Abel  tiraba a Lupe como una bolsa de papas, cosa que le encantaba. O iban al arroyo, que está al lado del predio del club y jugaba con los otros niños en el gomón que le habían regalado sus tíos.
A la nochecita marchaban los tres, después de cenar, todos los días, a la heladería a comprar el tradicional helado de dulce de leche, frutilla y chocolate. Luego, se dirigían a la plaza principal, enfrente de la iglesia y mientras los tíos conversaban caminando alrededor de la plaza, Lupe andaba en bici.
El día martes, cuando salían del súper con su tía, una vecina se acerca a ellas y les dice:
-¿Mabel, sabías que el sábado viene Luis Miguel al club?
La pequeña niña sintió en ese momento una alegría y emoción tan grande, ya que en aquella época le encantaba Luis Miguel. Tenía sus casetes, cantaba todo el día las canciones, miraba todas sus películas, en fin era su fans.
Tía Mabel miro a Lupita y preguntó:
-¿Querés ir, negrita? Vamos hasta el club y compramos las entradas ahora.
-Sí, tía, porfi, nunca pensé que iba a poder verlo tan cerquita, vive en México, ¿sabías?
-Sí, sabía. Vayamos entonces.
El evento se realizaría el sábado a las 20:30 en el Club La Emilia. A partir de ese momento, Lupe contaba los minutos para que llegara el tan ansiado recital; fantaseaba todo el día con él. Sus tíos pertenecían a la comisión directiva del club, le habían prometido que se ubicarían en un lugar muy cerca del escenario. Ya tenía el atuendo para la ocasión, un conjuntito de casaquita y pollerita blanco con florcitas rosa pálido hermoso que le compró su tía Mabel, con unos zapatos Guillermina rosa a tono con el vestido y perfume Coqueterías.
El sábado amaneció soleado y caluroso, un día espléndido. Lupe durmió la siesta para estar despierta hasta que el recital culminara sin problemas. Pero como a las 18 empezó a desmejorar, un atardecer gris reemplazó el acostumbrado celeste y naranja del cielo, en el horizonte, el cual veía cada tarde, porque la casa de los  tíos de Lupe era amplia y se podía ver la puesta del sol.
 Tía Mabel  llamó a Lupe a la cocina, donde estaba haciendo pizza para la cena y le dijo:
-Negra, si el clima sigue así no te llevo al club, tengo miedo de que te mojes y te enfermes, ¿estamos de acuerdo?.
Cuando tenía 3 meses padeció  de encefalitis que derivó en una meningitis viral al nacer a los ocho meses de gestación y no haberla puesto en incubadora. Casi muere. Fue tan grave, que fue sometida a constantes exámenes hasta los 5 años de edad. Inclusive le vaticinaron a los padres que quedarían secuelas que repercutirían en su desarrollo cognitivo, pero gracias a dios eso no pasó. De todos modos, el temor perduraba en los seres queridos.
-Está bien, tía, dijo mirándola a los ojos y rogando por dentro que el tiempo mejorara. Creo que la tía pudo leer la súplica en los ojos de la niña, porque la abrazo muy fuerte, acariciándole las trenzas como pidiéndole disculpas por sus temores y la inminente desilusión de la pequeña.
El cielo amenazaba con relámpagos y soplaba un viento frío y desesperanzador para la chiquilla, a la hora que debían estar en el club; el show no podía suspenderse porque había mucho dinero invertido en el mismo, así que se tomaron recaudos poniendo un techo de lona en el escenario para que la estrella cantara sin mojarse.
Como a las 21, Luismi subió a escena y comenzó a cantar “Good Morning love”. Previo a esto, había saludado, agradeciendo al público presente su asistencia y manifestando sentirse feliz de estar allí. Luego cantó todas las canciones del primer álbum y algunas del segundo. Al comenzar cada canción, las féminas gritaban efusivamente dando la bienvenida a cada representación que la adolescente estrella exponía, mientras el cielo hacía juego de luces con los relámpagos.
Lupe lo oía todo, ya que se encontraba a unos cuantos metros del show, sentadita en el tapialcito del frente de la casa de sus tíos. Se balanceaba al ritmo de la música, con los ojitos cerrados. Cantó durante la hora y media que duró el espectáculo las letras de su artista favorito como si estuviera frente a él.

Lupe no pudo ir a ese recital, pero igual recuerda con mucha alegría la noche de verano de 1986 cuando Luis miguel cantó en el club La Emilia.

10 comentarios:

  1. AL FINAL NO LA LLEVARON, DEJENSÉ DE JODER, HUBIERAN PEDIDO CONSEJOS A UN MEDICO, PERO OCASIONES COMO ESA NO SE REPITIERON JAMAS. LE QUITARON A ESA PERSONA EL DIA MAS FELIZ DE SU VIDA POR SER ENFERMA, VAYANSÉ A LA PUTA QUE LOS PARIÓ, YO SI FUERA LUPE ME CAGO EN LOS AÑOS QUE PUDO VIVIR DE MAS GRACIAS A QUE NO FUE ESE DIA AL RECITAL (QUE SEGURO NO LE IBA A PASAR NADA, COMO DE COSTUMBRE) LA FELICIDAD ES LO MEJOR DE LA VIDA, SEA CORTA O LARGA, Y SI VA A SER UN SUEÑO CUMPLIDO ES MEJOR ARRIESGARSE, MANGA DE HIJOS DE PUTA.

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  2. Lo mejor el comentario final. Que hijos de puta pobre lupe

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  3. Una sanata total. Luis Miguel estuvo en los bailes del Club La Emilia en marzo de 1984 con 13 años (cumpliria 14 el 19-4-1984) y dio un malogrado show de apenas dos temas por un gran problema climatico (tormenta electrica y lluvia torrencial). Rectifiquen el relato o presentenlo como un cuentito, de real no tiene casi nada. Fue en la presentacion de su disco Decidete de 1983. Exitos

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  4. Recuerdo que también me quedé con las ganas de ir.. yo tenía 10 años.. pero por la tormenta que vino.. recuerdo eso.
    Y tenía entendido que mucho no estuvo en el escenario. Alguien tiene otro dato?

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  5. Yo fui tenía 7 años canto 3 o 4 canciones estaba acompañado de 4 bailarinas. Hasta que empeso a soplar viento que empedo a dar vuelta las mesas y se largó una lluvia muy fuerte

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  6. Que buen recuerdo,Luis Subio al escenario y cuando se mojo todo el equipo de sonido y podía ya ser peligroso se suspendió el recital ya que el micrófono le dio alguna patadita eléctrica....

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  7. Yo tenía 12años y trabajaba en la cantina y me acuerdo que cantó sólo dos canciones y se suspendió por la fuerte tormenta que vino esa noche me acuerdo que no cavia un alma y me acuerdo que Luis Miguel avía pedido algo para tomar antes de que empiece el a cantar y yo le lleve una coca y me acuerdo que el me preguntó si avía mucha gente y yo le dije si no entra más nadie

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  8. Y el vino en febrero de 1984 no me acuerdo que fecha pero vino en febrero

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  9. El micrófono estaba humedo y al tocarlo tuvo una pequeña descarga que hizo que lo tirara

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